El 17 de noviembre se celebra en todo el mundo el Día Mundial de la Construcción, inspirado por una majestuosa obra vial de navegación artificial, el Canal de Suez, obra que posee importantes implicancias para el comercio internacional y la logística para el transporte de mercancías. Está situado en Egipto y une el mar Mediterráneo con el golfo de Suez (mar Rojo) a través del istmo de Suez.
El canal de Suez se inauguró hace más de 150 años, impulsado por el francés Ferdinand de Lesseps. La construcción comenzó en abril de 1859, y se estima que más de 1 millón y medio de personas trabajaron en la obra. El canal se inauguró el 17 de noviembre de 1869.
El Canal de Suez tiene una longitud de 164 km y una profundidad de 8 metros. La obra atraviesa 2 lagos a lo largo de 30 km de su longitud. En el presente, la mayor parte del canal tiene un ancho apenas suficiente para el tránsito en un solo sentido, de esta forma los buques deben transitar en convoy por el canal. Desde 2014 se comenzaron a realizar obras de ampliación y accesos complementarios, dada la cantidad de buques que deben circular por allí.
En marzo de 2021 se produjo un bloqueo temporal del canal por un buque que encalló y quedó atravesado en el canal, impidiendo el paso de manera total por varios días. Un buque portacontenedores de 400 metros de eslora se hallaba en camino a Países Bajos desde China cuando, ya dentro del canal, fue golpeado por una intensa ráfaga de viento que lo hizo desviarse hacia la orilla. Tras tocar tierra, el barco giró y entró en una posición perpendicular al curso del agua, bloqueando completamente el canal. Esto ocurrió en una sección del canal que no estaba adaptada a este tipo de eventos y, por tanto, la posibilidad de realizar una conexión secundaria que permitiría circunvalar la obstrucción fue inmediatamente descartada. En su momento se estimó que el 10% del comercio mundial de mercancías estaba pasando por esa vía y quedó obstaculizado, ocasionando pérdidas muy importantes.
El canal permite el paso de barcos de hasta 20 metros de calado o 240.000 toneladas de peso muerto y una altura máxima de 68 metros por encima del nivel del agua. La luz máxima que permite es de 77,5 metros bajo una serie de condiciones. Estas dimensiones limitan el tamaño de los nuevos barcos contenedores construidos, para que puedan transitarlo. Las limitaciones que impone el canal egipcio son menos restrictivas que las del canal de Panamá, lo que había llevado a que este último se quedara atrás en la pugna por convertirse en la vía preferida por los buques. En algunos casos, los barcos deben descargarse para poder transitar.
Los barcos que cumplen con los parámetros adecuados para navegar por el canal en cuanto a calado, manga y altura son calificados como barcos tipo Suezmax.
